Punción Seca

¿Qué es?

La técnica de la punción seca se basa en introducir una aguja en la zona del músculo donde se encuentra el punto gatillo. El objetivo es conseguir una respuesta de espasmo local para liberar la tensión muscular y estimular el proceso de curación de los tejidos, disminuyendo el dolor.


Punto gatillo miofascial: En las fibras de un músculo encontramos una banda tensa de fibras y dentro de ésta como un pequeño nódulo muy doloroso en la palpación, este pequeño nódulo o punto doloroso es lo que denominamos Punt Gallet. La presión de este punto puede provocar dolor referido a la zona donde el paciente nota el dolor normalmente (Punto gatillo activo)

La aguja utilizada es muy delgada y la mayoría de pacientes ni siquiera se dan cuenta cuando entra en la piel. Cuando llegamos al punto gatillo, se puede notar una sensación como de rampa muscular, que es la respuesta de espasmo local, y también sentir cómo se reproduce su dolor, que sirve de indicador diagnóstico de que realmente estamos en un punto gatillo.

Los pacientes, después de unas sesiones, aprenden a reconocer e incluso a esperar con ganas estas sensaciones, porque saben que esto provoca la inactivación de este punto, consiguiendo así una reducción del dolor y devolver a la normalidad la función y longitud de los músculos implicados.


¿Qué puede tratarse?

La punción seca es un tratamiento efectivo por el dolor crónico músculo-esquelético con muy pocos efectos secundarios (dolor residual como agujetas uno o dos días después del tratamiento).

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